5.1.10

Como Toby

El título de este post explica de qué va en cierto sentido. Desde hace casi siete años que vivo en el D.F. la mayoría de las amistades que tengo son mujeres. Esto, a mi parecer, tiene su origen en un trauma de la prepa, etapa durante la cual encontré a mis mejores amigos, pero al mismo tiempo fuimos tan herméticos que terminamos formando un Club de Toby.

Aunque Mauricio y yo les intentamos presentar opciones al resto de los Bombonetes*, siempre se excusaron de una u otra forma: son feas, son fresas, para qué si así estamos bien, etc.

Sin darme cuenta, desde que entré a la carrera, busqué más amigas y la relación para lograr un amigo hombre heterosexual, pues nomás no. Hasta que me empecé a llevar más con Luis Raúl -con quien terminamos en Pedro Infante No Ha Muerto a las 6:00hrs y casi nos vamos a Acapulco-, después sería con Memo -cinéfilo y aficionado de closet al futbol y videojuegos- , gracias a su noviazgo con Ariadna, una de mis amigas más cercanas.

Hasta ahora que empecé a laborar en un periódico hice un nuevo amigo muy cercano, Alonso David. Un tipazo con el que comparto gustos musicales y de quien he aprendido a dejar de ser tan aprensivo con cosas que no valen la pena.

Los lectores masculinos entenderán la necesidad de confiar en un cuate con quien puedas ir a tomarte unos tragos, a ahogarte de borracho si estás herido o triste, que puedes compartir observaciones variles con respecto a las féminas, que tenemos un código firme el cual reza en inglés: bro's before hoe's.

Porque son otro tipo de relaciones, que por alguna razón se me ha dificultado. Pero ahora estoy contento.

2 comentarios:

Dr. Acula dijo...

El problema de las amistades del sexo femenino es que al estar rodeado de ellas lentamente vas perdiendo ante sus ojos "masculinidad" ya que tarde o temprano pasarás a ser su amiga y confidente al igual que consejero de ropa, amigos, amoríos e incluso puede darse el caso de que seas su mascota en las tiendas (de esos que se pasan las horas del día atrás de ellas cargando las bolsas y esperándola cerca de los probadores) mientras que dentro de tu cabeza se repite un mantra que dice Que buena esta esta chava si me porto bien chicle y pega!!!

La pregunta fundamental es esta:

Existe la amistad femenina sin haber por lo menos algo de atracción haca ellas?

Juan Eme dijo...

Estimado Dr.Acula,

uno debe llevarse con las amigas del objeto del deseo. Ellas serán las que hablarán bien de ti.

Pero una cercanía de ser una mascota es una cochinada que tendemos a hacer por quedar bien con la galana.

Si te gusta una chava tú sólo le hablarás para salir con ella para unas chelas. Si puede bien, sino ni modo.Si te agarra de confidente/amigo/basura le dices gracias pero no.

Y en mi experiencia si existe la amistad con las féminas. Es cuando quedan en el baúl de los ositos. Cuando las ves como hermanas o hermanos, más que de otra forma.