Rafael nació en Pinotepa Nacional -un pueblo lleno de polvo, pólvora y mucho sol- en donde su papá fue el primer dentista, y el primero en llevar un cinematógrafo para la gente.
Desde los 15 años Rafael se fue a la Ciudad de México a estudiar la prepa y continuar sus estudios en algo que le redituara a largo plazo. De ahí que decidió iniciar una carrera en petroquímica, pese a que su padre siempre deseó que alguno de sus hijos heredara su legado de los dientes.
Durante unas vacaciones de verano de Rafael fue a visitar a su familia. Le pidió la camioneta a su papá para ir a nadar al río del Limón. No sé si fue la prisa o que tomó mal una curva de la carretera, el punto es que se volcó.
Él estaba intacto. La camioneta deshecha.
Dado que no tenía dinero, la única forma en que se le ocurrió que podía compensar su error fue al complacer a su padre: estudiar odontología, carrera que odió.
Pero en la facultad de la UNAM conoció a Martha. Con ella viajó por Egipto, Grecia, Alemania, Suiza, Canadá, Estados Unidos. Se casaron y tuvieron dos hijos, Daniel y Juan. El primero cuida al otro, aunque no están en el mismo planeta.
Rafael y Martha escuchaban UB40, Bob Marley y Billy Joel en el coche mientras Juan leía a Mafalda.
Rafael y Martha se divorciaron.
Yo sigo escuchando a Billy Joel.
Desde los 15 años Rafael se fue a la Ciudad de México a estudiar la prepa y continuar sus estudios en algo que le redituara a largo plazo. De ahí que decidió iniciar una carrera en petroquímica, pese a que su padre siempre deseó que alguno de sus hijos heredara su legado de los dientes.
Durante unas vacaciones de verano de Rafael fue a visitar a su familia. Le pidió la camioneta a su papá para ir a nadar al río del Limón. No sé si fue la prisa o que tomó mal una curva de la carretera, el punto es que se volcó.
Él estaba intacto. La camioneta deshecha.
Dado que no tenía dinero, la única forma en que se le ocurrió que podía compensar su error fue al complacer a su padre: estudiar odontología, carrera que odió.
Pero en la facultad de la UNAM conoció a Martha. Con ella viajó por Egipto, Grecia, Alemania, Suiza, Canadá, Estados Unidos. Se casaron y tuvieron dos hijos, Daniel y Juan. El primero cuida al otro, aunque no están en el mismo planeta.
Rafael y Martha escuchaban UB40, Bob Marley y Billy Joel en el coche mientras Juan leía a Mafalda.
Rafael y Martha se divorciaron.
Yo sigo escuchando a Billy Joel.
Y leyendo a Mafalda.
Feliz día de San Valentín "y así".
Feliz día de San Valentín "y así".
4 comentarios:
¡Qué bonita historia!
Un poquito de azucar en un día de la chingada como el 14.
:)
me gusto mucho la historia amigo!!!!!!!!, hace dos dias soñe con vos carnal,,, me dieron ganas de hablar contigo, en fin regreso pronto vamos por unas cervezas bien frias con cacahuates y charlamos como en los no tan viejos tiempos!
Carnalito!
ojalá nos podamos reunir pronto para filosofar y debrayar de las mujeres, que por fortuna ya no tienes necesidad de eso jaja.
gracias por leerme
(:
Grande juanito, estupenda historia en verdad conmovedora. Curiosamente para mi Billy Joel tambien es parte de una selecta coleccion de artistas que me representan mi infancia y en especial mi relacion con mi papa.
Un fuerte abrazo, y no tienes uno sino dos hermanos cuidandote cabron.
Un abrazo,
El Morris
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