Hace mucho que le tenía un amor platónico a Audrey Hepburn como Holly Golightly, por esa elegancia de vestido negro, perlas y su estilo.
Tal como deben ser los amores platónicos era irracional. La verdad es que tenía mis dudas de ver Breakfast At Tiffany's, para evitar el desencanto y ver una chick flick de los 60 en donde todo fuera demasiado rosa, sobreactuado.
Todo lo contrario, me cautivó su actitud, su manera de ser, de ver las cosas con tanta tranquilidad. Que guarde sus zapatos en el refrigerador, su porte, los chistes, todo ella tan coqueta y desenfadada. Lo que lleva a su defecto, es demasiado frágil.
Ahí es donde interviene el galán, un escritor, Paul Varjak (George Peppard) mantenido por su amante. Por el momento está estancado, con un sólo libro de cuentos bien reconocido, sin otro éxito.
Entonces conoce a Holly, de quien se va enamorando y a quien busca a final de cuentas salvar.
Ahí es cuando me di cuenta de mi problema, tengo un complejo de Paul Varjak. A veces, no siempre, pasa y no está padre. Las busco así, por esa autenticidad, por la libertad, pero muchas veces buscan quien las salve y eso, insisto, no está padre.
En fin, otra recomendación para ver con los cuates o con su Holly Golightly personal.
Tal como deben ser los amores platónicos era irracional. La verdad es que tenía mis dudas de ver Breakfast At Tiffany's, para evitar el desencanto y ver una chick flick de los 60 en donde todo fuera demasiado rosa, sobreactuado.
Todo lo contrario, me cautivó su actitud, su manera de ser, de ver las cosas con tanta tranquilidad. Que guarde sus zapatos en el refrigerador, su porte, los chistes, todo ella tan coqueta y desenfadada. Lo que lleva a su defecto, es demasiado frágil.
Ahí es donde interviene el galán, un escritor, Paul Varjak (George Peppard) mantenido por su amante. Por el momento está estancado, con un sólo libro de cuentos bien reconocido, sin otro éxito.
Entonces conoce a Holly, de quien se va enamorando y a quien busca a final de cuentas salvar.
Ahí es cuando me di cuenta de mi problema, tengo un complejo de Paul Varjak. A veces, no siempre, pasa y no está padre. Las busco así, por esa autenticidad, por la libertad, pero muchas veces buscan quien las salve y eso, insisto, no está padre.
En fin, otra recomendación para ver con los cuates o con su Holly Golightly personal.
1 comentario:
¡Amo a Audry!
En ese mismo apartado está la era jovencilla de la Streisand y las pelis de Judy Gardland.
Tan inspiradóras ellas-
:)
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