El fin de año

Me gustan los últimos días de diciembre porque me da la sensación que se acercan 365 días nuevos, en blanco, con un montón de posibilidades.

Me gusta el final del año porque, al menos los últimos 5, nunca tengo la intención de recordar lo que sucedió. Excepto eventos contados, quiero borrar mi cassette, magnetizarlo y hacer un swede de mi vida (véase Be Kind Rewind [2008]). En donde todo es cómico y mal hecho, pero contado mejor que el original.

Lo rescatable de 2010 fue la boda de Charly y Marce. Un punto épico que quiero revivir a través de fotos y "te acuerdas de". Lo demás fue basura acumulada en mi ser; la cual tengo que limpiar pese a mi desidia -puta desidia-.

Conseguí entrar al periódico de mi sueño, lo que anhelé durante gran parte de la universidad. Por mala suerte (y falta de paciencia) no a la sección que quería, me pesó y renuncié; otra decisión que me pesó al inicio. Porque nunca puedo quedar bien con todos o las decisiones que tome.

También tuve el noviazgo más largo de mi historia; y de  los más lindos sin duda. Siete meses que disfruté mucho, para darme cuenta acerca de lo que busco en una chica, y darme cuenta que no se puede tenerlo todo. 

En este momento un grupo forense busca descifrar las causas de muerte de la relación; los expertos en el tema me aconsejan que lo deje ir. Que no vale la pena atormentarme con la verdad, que mejor disfrute el recuerdo engañoso y finja que todo está bien.

Me dicen que un one-night stand es la solución a mi problema. Coges y ya. Nunca lo he intentado. Tampoco me interesa. Y seamos honestos, soy torpe como la chingada cuando se trata de ligar/flirtear. Mi vida sexual bien pudiera armarse con pedazos de comedias románticas (e.g. 40 Year Old Virgin; Super Bad; cualquiera con Michael Cera).

Por otro lado sería una experiencia que sería muy graciosa. Un punto medio entre Woody Allen y Steve Carell, interpretado por Cera.

"Oh mi trágica vida, alguien asístame a un suicidio accidental".

No. Basta de autocompasión y todo lo que implica. Que hueva me da oírme, mejor escucho a los demás. Chance pueda aprender a ser menos intenso, más normal y dejar de hacerme chaquetas mentales. En otras palabras, dejar de sabotearme.

Ahora que en el saldo positivo sé con quienes puedo contar. Amigos incondicionales. Esa es mi enseñanza de 2010.

A todos ellos les agradezco de manera infinita su apoyo.

Así que espero que el 2011 sea menos complicado. Todos dicen que si la vida fuera fácil sería aburrida, que todo lo "malo" es un reto. Pues ya me cansaron los retos. Por ello pido que al menos los primeros seis meses sean tranquilos, nada agitado, de pocas novedades. 

Me conforme con estar entumido y feliz. Comfortably Numb.